En esta nota te contamos cómo optimizar el rendimiento académico y obtener mejores resultados en el estudio mediante la alimentación.
Cuando hablamos de que el cerebro tiene que estar en forma nos referimos a mantener la mente activa y evitar su deterioro prematuro. Y entre los recursos que nos permiten mantener nuestro cerebro en forma y mejorar la agilidad mental están los alimentos.
Muchos alimentos, gracias a sus propiedades, nos permiten mantener la mente activa, mejorar la agilidad mental, la capacidad de concentración y hasta prevenir ciertas enfermedades neurodegenerativas.
Siempre se ha dicho que el pescado es bueno para el cerebro, y esto es totalmente cierto porque el Omega 3 presente en ciertos pescados favorece tanto el funcionamiento como el regeneramiento de las células nerviosas o neuronas. Además, el omega 3 ayuda a mejorar la capacidad de memoria y concentración.
Los alimentos ricos en hierro como la carne y las lentejas también son buenos para el cerebro porque ayudan a desarrollar la capacidad de atención, de memoria y de rendimiento cognitivo.
Ciertos alimentos como los cítricos, las manzanas, la rúcula y el chocolate poseen un pigmento natural denominado flavonoide que tiene gran cantidad de beneficios para la salud, entre los cuales podemos mencionar su capacidad para mejorar la memoria, evitar la demencia y otras enfermedades como el Alzheimer.
Los radicales libres que se generan cuando el cerebro metaboliza el oxígeno dañan nuestro cuerpo y son una de la causa del envejecimiento; por eso para detener su fuerte influencia es importante consumir antioxidantes.
Los alimentos ricos en yodo también son buenos para el estudio porque ayudan a mantener un buen rendimiento cognitivo y un adecuado nivel de concentración y atención. De todos modos este mineral se debe consumir con moderación.
Y por último, uno de los elementos indispensables para una mente despierta es el agua. La hidratación es fundamental para el estudio, si el cerebro no está lo suficientemente hidratado podemos sufrir la pérdida de memoria y el deterioro de otras funciones cognitivas como la concentración, la velocidad de procesamiento y la capacidad de aprendizaje.
Hasta aquí hemos visto cómo influye la alimentación en el desarrollo de nuestra capacidad cognitiva, si te gustaría aprender mucho más sobre las diferentes técnicas para mejorar la comprensión lectora, la oratoria y el aprendizaje, te invitamos a realizar el curso de Técnicas de Estudio a distancia. ¡Te esperamos!
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